Te amo.

Te mire a los ojos fijamente buscando una respuesta a mis dudas, estuve a punto de encontrarla hasta que interrumpiste mis pensamientos con una pregunta que me sorprendió al escucharla, una pregunta que me paralizo el corazón y que hizo derramar más de una lágrima.

¿Por qué me amas tanto? Volviste a repetir. En ese momento no sabía que responder, me quede mirando la nada y fue ahí cuando me di cuenta que te ame desde el primer día que vi tus ojos y me dijiste lo maravillo que había sido conocerme, te ame desde el primer día en que me besaste tan suavemente y cuando me tomaste de la mano lentamente para caminar a tu lado, desde ese preciso momento… te amé.

Nunca imagine poder amar, nunca pensé que el amor existía y creí que un “te amo” era una forma de decir “te quiero” pero exagerando los sentimientos. Ahora, con solo mirarte, con solo sentir tu aroma por todo mi cuerpo, sentir tus manos acariciar las mías y sentir tus labios rosar los míos, se lo que significa un verdadero “te amo”, se lo que es amar, se lo que es querer y se lo maravilloso que es estar a tu lado.

Te amo por la forma en la que me vez, te amo por la forma en que me abrazar, te amo por la forma en la que me besas suavemente, te amo porque no me importa lo que ocurra después, te amo porque cuando sonríes borras las tristezas, te amo por cada latido, cada beso, cada caricia mía que son para mí, por eso y mil razones más, te amo.