viernes, 30 de julio de 2010

Ella rié con el alma destrozada

Ella, ella finge estar bien, ella finge ser feliz, pero por dentro esta con el alma destrozada. Ella, aquella que ríe mientras llora, la que juega con muñecas, como jugaron con ella.
Ella, ella se llama Ximena, ella canta mientras baila, piensa mientras siente, pero siempre ríe mientras llora.
Ella quiere perder el miedo de decir lo que siente, agarra el teléfono, quiere hablar contigo, pero no puede hacerlo al escuchar tu voz y quiere decirte tantas cosas pero solo cuelga.

Estaba en su cuarto mientras escuchaba música pero fue ahí donde empezaba lo peor que podía pasarle en la vida, él iba acercándose mientras tiraba la puerta de la entrada, ella temblaba porque ya sabía lo que venía, Ximena tenía miedo y entro en pánico cando él entró, invadió el único lugar donde Ximena se sentía segura, el único lugar donde el no había tocado, pero ahí estaba, borracho, pero estaba.
Fe acercándose a ella y ella retrocedía, el se quitaba la correa mientras ella lloraba y le rogaba que no le haga nada, pero él, no creía en nada ni nadie y empezó a golpearla. Ximena no sentía los golpes ni lloraba por ellos, solo por Santiago, porque ella pensaba que en algún momento se iba a disculpar pero ella no lo perdonaría. Como es posible que la persona que ama a su mama y que juro cuidarlas podría abusar de ella, pues no le había echo nada, pero la belleza no la podía esconder.

Santiago iba tocándola mientras ella lloraba, pero Ximena pensaba en Alonso, la única persona capaz de amarla y la única persona a la cual Ximena no se acerco por miedo a que le haga todo lo que le hace Santiago mientras su mama no está.

Ella a pesar de todo seguía riendo con el alma destrozada, ella sufría por amor pero al mismo tiempo no quería saber de el, ella quedo escondida en aquella habitación donde que quedo al descubierto la ternura del alma, donde le quitaron lo poquito que tenia, donde la violaron sin pensar en lo que ella sentía.
Nunca contó lo que ella pensaba o quería, Santiago le destrozo la vida, pero Ximena sigue riendo. Ella ríe con el alma destrozada.

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